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Eurovita/Cinven: el fracaso plantea preocupaciones sobre el impulso de compra en seguros

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Italia ha tenido una buena cantidad de colapsos bancarios. La implosión a cámara lenta de Eurovita es la primera vez que una aseguradora italiana choca contra una administración especial. Las tasas de interés más altas descarrilaron al grupo, situación que se resolvió la semana pasada. Las aseguradoras, incluidas Generali y Allianz, invertirán en una nueva empresa para asegurar los 10 millones de euros de activos de Eurovita.

Reguladores de seguros europeos están investigando si la quiebra de Eurovita planteó riesgos más amplios para la estabilidad financiera. Se espera que se centren en su propiedad por parte del grupo de capital privado Cinven. Es solo una de las empresas de capital privado que ha volcado dinero al sector de los seguros de vida en los últimos años en busca de mayores rentabilidades.

El fracaso de Eurovita comenzó el año pasado cuando los ahorradores canjearon pólizas para aprovechar tasas más altas en otros lugares. El debilitamiento de la posición de capital de Eurovita la obligó a vender bonos del gobierno que habían bajado de precio.

Los reguladores exigieron más capital de Cinven, con sede en el Reino Unido, para apuntalar el índice de solvencia de Eurovita. Cinven finalmente aportó 100 millones de euros, pero eso fue muy inferior a los 400 millones de euros que se creían necesarios para recapitalizar la aseguradora.

Eurovita ahora se dividirá y sus activos se redistribuirán.

Los grupos de capital privado han visto durante mucho tiempo aseguradora como ofrecer flujos de efectivo de buena calidad a niveles más altos que las inversiones convencionales de menor riesgo. En los EE. UU., alrededor del 12 por ciento de los activos de vida y rentas vitalicias ahora son propiedad de capital privado, según McKinsey. En Europa, los grupos de compra han realizado acuerdos por valor de 25 millones de dólares en el sector de vida durante la última década. 

El aumento de las tasas significa que los riesgos de caducidad están aumentando al mismo tiempo que la calidad de los activos, como los bonos corporativos, está cayendo.

Esto exacerba las preocupaciones sobre los inversores a mediano plazo, como los fondos de capital privado, que asumen la responsabilidad de los pasivos a largo plazo. Es posible que no estén dispuestos a asumir pérdidas a lo largo del ciclo de la industria. La ingeniería financiera relacionada con los seguros desempeñó un papel en la minicrisis de los gilts del Reino Unido el año pasado.

Los reguladores tienen razón al prestar más atención.

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